28,4 millones de euros es la cifra por la que se ha vendido nada más y nada menos que este Ferrari de 1962 llegando así a colocarse en primera posición como la subasta de un coche más cara hasta el momento.
En un primer momento se creyó que se alcanzaría la cifra de los 70 millones de dólares, una cantidad sin duda demasiado desorbitada que finalmente no se cumplió. No obstante, más de 38 millones de dólares es una cantidad más que elevada aunque no nos extraña dado que los vehículos antigüos es uno de los sectores que más se está revalorizando en los últimos tiempos.
Esta pieza en concreto pertenece a la Colección Maranello Rosso, fue el decimonoveno 250 GTO Berlinetta fabricado por la compalía y se terminó en 1962 cuando fue adquirido por una única familia que lo ha tenido con él durante 49 años.
Sin embargo, este coche tiene historia uesto el que campón francés de esquí en el Tour de Francia de Automóivles de 1962 llamado Henri Oreiller tuvo un accidente durante una carrera al sur de París que le provocó la muerte. Posteriormente, dado el valor del vehículo se reparó en Italia y se vendió al piloto italiano Paolo Colombo para participar en una competición al año siguiente del siniestro donde finalmente en 1965 Frabrizio Violati, un joven adinerado se hizo con él.
Durante todos esto años, su dueño condujo esta pieza sólo en eventos de coches clásicos y carreras de automóviles históricos hasta su muerte hace 4 años.
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