La historia del coleccionismo chino se remonta cientos de años atrás sin embargo es en el momento actual cuando las empresas extranjeras deciden invertir en China como una gran potencia de compra y venta de arte.
Y es que este mercado cada vez se expande más y se nota su presencia alrededor de todo el mundo por eso están proliferando los asesores de arte entre los coleccionistas chinos para conseguir las mejores subastas. Este hecho es consecuencia directa del aumento de los multimillonarios chinos que o tienen como afición la adquisición de obras de arte y antigüedades; o bien, lo hacen como forma de inversión.
Además, el perfil del comprador chino es muy específico porque aunque en Occidente la clase media también tiene acceso a este mercado, en China sólo la alta sociedad está en este mercado.
Claro que la importancia del gigante asiático no radica exclusivamente en la demanda, también es cada vez más relevante la oferta y cuya cifra seguirá aumentando según auguran los expertos.
Por zonas, Hong Kong se sitúa como la primera potencia artística en Asia por lo que es el corazón de la mayoría de las subastas que se celebran en todo el país. Le sigue la ciudad de Pekín con la proliferación de galerías de arte.